Guía de Migración a SEPA

¿Qué es SEPA?

Europa dispone desde el año 2002 de una Unión Monetaria. Puesto que compartimos
la misma moneda con otros 16 países, hacer pagos en efectivo en dichos países es
exactamente igual que en España. La cosa se complica cuando, en vez de con efectivo,
decidimos pagar a través del banco a otro país. Esto se debe a que cada uno de los países
de la Zona Euro tiene un sistema de intercambio de operaciones bancarias distinto, con
normativas distintas e instrumentos de pago diferentes.

La creación de la Zona Única de Pagos en Euros (Single Euro Payments Area -
SEPA) tiene como objetivo erradicar esta situación. Todos los países adscritos a la Zona
SEPA compartirán los mismos instrumentos de cobro y de pago, la misma normativa y los
mismos procedimientos de intercambio, de forma tal que para los países firmantes se
eliminarán todos las barreras en el intercambio de transacciones bancarias en euros.

¿Qué va a suponer todo esto para los usuarios de servicios pago?

¿Qué va a suponer todo esto para los usuarios de servicios pago?

SEPA va a tener repercusión directa sobre los consumidores y empresas. En primer
lugar, una vez que adoptemos las transferencias y los adeudos SEPA, podremos realizar
pagos y cobros al resto de los países de la Zona SEPA como si de operaciones nacionales
se tratase. Esto es así porque con SEPA desaparece la distinción entre operaciones
nacionales y al extranjero, sustituyéndose por las categorías de transacciones SEPA, a
cualquiera de los 33 países que la constituyen; y transacciones al resto del mundo o fuera
de la Zona SEPA. Esto tiene ventajas evidentes. A partir de ahora costará lo mismo en
términos de tiempo y comisiones, hacer transferencias de Cádiz a Jerez, que de Cádiz al
punto más septentrional de la Laponia Finlandesa. Además, surge la posibilidad de cobrar a
nuestros clientes del resto de Europa mediante recibo domiciliado, posibilidad que antes no
existía.

Por otro lado, la instauración de la Zona SEPA nos va a permitir operar con el resto de
los países suscritos desde una única cuenta. Así por ejemplo, un ciudadano Alemán que
tenga piso en Benidorm, ya no tendrá que abrirse una cuenta en un banco o caja local para
pagar los impuestos al ayuntamiento, los recibos de la luz y el agua, sino que podrá
domiciliar dichos cobros en su cuenta de Dusseldorf, ahorrándose las complicaciones y los
gastos de mantener varias cuentas. Igualmente, una empresa española podrá tomar la
decisión de contratar servicios financieros con un banco austriaco y pagar a sus clientes y
empleados desde allí. A largo plazo, la posibilidad de usar cualquier banco europeo
incrementará la competitividad en el sector y podrá derivar en un descenso en las
comisiones.

¿Cuándo va a entrar SEPA en funcionamiento?

La Zona SEPA inició su andadura en el año 2008, con el lanzamiento de las
Transferencias SEPA (SEPA Credit Transfers) y en 2009 con los Adeudos SEPA (SEPA
Direct Debits). Pese a que estos instrumentos de pago y de cobro han estado a nuestra
disposición desde entonces, su uso ha sido prácticamente insignificante en toda Europa. A
la vista de que la migración a los medios de pago SEPA no se iba a producir
voluntariamente, como el Consejo Europeo deseaba, se promulgó en 2012 un reglamento
que fijaba el 1 de febrero de 2014 como la fecha límite para adoptar obligatoriamente los
adeudos y las transferencias SEPA como medio de pago estándar en toda Europa.

¿Cuanto me afecta SEPA y por tanto, qué guía de migración he de leer?

Es importante saber que SEPA afectará a todos los usuarios de servicios de pago,
aunque no por igual. En función de la diversidad de medios de pago afectados por SEPA
que empleemos, tendremos que dedicar más o menos recursos a adaptarnos. Los medios
de pago afectados por SEPA viene resumidos en el siguiente cuadro:

Cómo se puede apreciar en la tabla, no todos los instrumentos de pago actuales se
ven afectados, sólo los mencionados y en las fechas indicadas. A partir del 1 de febrero de
2014, quedan prohibidas las operaciones reguladas por los cuadernos 19 y 34 de la
Asociación Española de Banca (AEB), siendo obligatorio el uso de sus equivalentes SEPA:
el adeudo y la transferencia SEPA. Así por el contrario, si usted es un usuario de Anticipos
de Crédito, o de Letras, Efectos y Pagarés, tiene aún dos años para adaptarse al
instrumento de cobro o de pago sustitutivo, pues no habrá prohibición de usar estos medios
de pago hasta febrero de 2016.

Para evitar lecturas innecesarias, esta guía de adaptación se divide en tres apartados
en función de nuestro perfil de usuario de servicios de pago. Acuda a la tabla y lea la guía o
guías que le afecten:

1. Guía de migración para consumidores , aquellos individuos o empresas que usan
esporádicamente transferencias bancarias para hacer sus pagos y que reciben
cobros domiciliados en sus cuentas. Esta guía es de recomendada lectura para
TODOS los usuarios.
2. Guía de migración para emisores de remesas de transferencias.
3. Guía de migración para emisores de remesas de adeudos domiciliados.

Son muchos los cambios que van a producirse como consecuencia de la entrada en
vigor de la Zona SEPA, pero en realidad, son pocos los cambios que percibirá el usuario
básico:

El IBAN

El cambio más evidente será que el CCC (Código de Cuenta Cliente) será sustituido
en todas las operaciones SEPA por un IBAN (Código Internacional de Identificación
Bancaria). Por tanto a partir del 1 de febrero de 2014 necesitaremos informar un IBAN para
realizar cualquier operación, nunca más un CCC. Esto supondrá que tendremos que
conocer el IBAN de nuestras cuentas y de aquellas cuentas a las que transfiramos dinero
habitualmente.

Es recomendable conocer la estructura general de un IBAN para evitar confundirlo
con otros códigos similares. Un IBAN tendrá un máximo de 34 posiciones, el IBAN español
tiene 24 posiciones y su longitud varía de un país a otro. Todos los IBANs comienzan por
dos letras que representan el país al que pertenece la cuenta, de modo que la forma más
sencilla para identificar un IBAN es buscar este código.

Todos los IBANs españoles comenzarán por “ES”, seguidos de dos Dígitos de Control
y a continuación los 20 dígitos del CCC de la cuenta actual. En consecuencia nuestro IBAN
será el CCC de nuestra cuenta de toda la vida encabezado por ES y dos números que nos
habrá de calcular el banco o algún programa informático. En la página www.sepaesp.es
existe un conversor de CCCs a IBANs.

El BIC

El BIC (Código de Identificación Bancaria) desaparecerá paulatinamente. Será
obligatorio para transacciones fuera de España hasta febrero de 2016, momento a partir del
cual se usará exclusivamente para operaciones con destino fuera de la Zona SEPA. Todas
las operaciones SEPA serán sin BIC a partir de febrero de 2016. Para reconocer un BIC
hemos de saber que deberá tener 8 u 11.

Tendrá 8 posiciones cuando el Código de Sucursal, los tres últimos caractéres, no se
informen. Deberemos conocer el BIC de las entidades extranjeras con las que operemos.